...cuanto va de necio a loco
Mi amigo Juan Alonso, sabedor de que no sé que es eso de la poesía, me envía estos versos de Góngora como “instrucciones”; o como manual de uso; o como espejo; o como lo que a mí me parezca.
Van pues:
¡Qué necio que era yo antaño,
aunque hogaño soy un bobo;
mucho puede la razón,
y el tiempo no puede poco!
A fe que dijo muy bien
quien dijo que eran de corcho
casco de caballo viejo
y cascos de galán mozo.
Serví al Amor cuatro años,
que sirviera mejor ocho
en las galeras de un turco,
o en las mazmorras de un moro.
Lisonjas majaba, y celos,
que es el esparto de todos1
los majaderos captivos
que se vencen de unos ojos.
De esta dura esclavitud
(hace un año por agosto)
me redimió la merced
de un tabardillo dichoso.
A este mal debo los bienes
que en dulce libertad gozo,
y vame tanto mejor
cuanto va de cuerdo a loco.
No rompen mi sueño celos,
ni pesadumbre mi ocio,
ni serenos mi salud,
ni mi hacienda mal cobro.
Tengo amigos, los que bastan
para andarme siempre solo,
y vame tanto mejor
cuanto va de cuerdo a loco.
Salgo alguna vez al campo
a quitar al alma el moho
y dar verde al pensamiento,
con que purgue sus enojos.
En mi aposento otras veces
una guitarrilla tomo,
que como barbero templo
y como bárbaro toco.
Con esto engaño las horas
de los días perezosos,
y vame tanto mejor
cuanto va de cuerdo a loco.
1 comentario
Anónimo -
http://www.youtube.com/watch?v=Pj4MVtoNWZc
(io)