Blogia
pepe-cerda

Del prodigio del confort.

Del prodigio del confort.

Leo en la contraportada del diario el Mundo de hoy:

 

“Es difícil explicar lo que siento al poder beber agua cada vez que tengo sed”

 

Lo dice China Keitesi ex niña soldado reclutada a los nueve años por una guerrilla Ugandesa. Hoy mujer adulta y refugiada en Dinamarca.

Es tremendo. En nuestro mundo beber agua con comodidad es como respirar. De más o menos calidad sale por cualquiera de los grifos que hay por todas partes, se entiende como una cosa “natural”, cuando si lo pensamos no hay nada más civilizado y por lo tanto más “artificial” que la complejísima red de distribución de agua y vertido de cualquiera de nuestras ciudades o pueblos.

Vivimos de espaldas a los milagros técnicos, morales y científicos de los que disfrutamos cada día y nos atormentan problemas imaginarios. Nos preocupa si nos hemos “realizado” en la vida o no, si somos o no suficientemente felices, si las tetas el culo o la barriga que nos han tocado en el reparto son las que nos gustan, y en un sinfín de bobadas similares.

La siguiente vez que nos duchemos deberíamos pensar por un instante en el prodigio que supone que lo podamos hacer en casa y a la temperatura que deseemos.

2 comentarios

Anónimo -

!Cuánta razón tienes !! Se puede decir más alto pero no más claro. Y lo más triste es que parece que seguiremos por este mismo camino.

LuisPi -

Pues sí Pepe, has dado en la DIANA, no nos damos cuenta de lo que tenemos, tanto es así que ni lo sabemos conservar, más bien lo derrochamos, lo mal utilizamos. En vez de houms sapiens deberiamos ser homus horribilis.

Mi pesame a los maños por lo de Gran Scala, en vez de crear cultura se favorece la industria del despilfarro. ¿Que ejemplo daremos a nuestros hijos?.