Comentario de io y declaraciones de Arroyo.
Como hay gente que entra en este blog y no lee los comentarios reproduzco seguidamente el de ayer de mi desconocido y amigo “io”. Que a su vez se hace eco de unas jugosas declaraciones de Eduardo Arroyo sobre el estado de la cuestión. Especial atención merecen las afirmaciones de la directora del F.R.A.C. de Lorraine: Béatrice Rose, cuando dice que los curators ponen las ideas y los artistas las obras. ¡Olé!.
Le cedo la palabra a “io” y a Eduardo Arroyo
SEPULTADOS POR LOS SNOBS DE LA MODERNIDAD QUEDARON LOS MAESTROS DEL XIX, QUE AHORA PARECEN QUERER RESUCITAR (EN EXPOSICIÓN SÓLO TEMPORAL, RECUERDA) AQUELLOS MISMOS, EN OPERACIÓN DE TRANSFUGUISMO PLÁSTICO, PARA RELLENAR EL NUEVO CUBO-PRADO DE MONEO. NO HAY PROGRESO Y NO HAY IDEOLOGÍAS POLÍTICAS EN PINTURA, SINO SÓLO PINTURA, BUENA Y MALA, Y CÓMO PINTABAN AQUÉLLOS...¿HAY ALGO SIQUIERA PARECIDO EN EL DESOLADOR PANORAMA ACTUAL? POR CIERTO QUE EL MEJOR DE TODOS ERA PRADILLA, QUE DE MANERA INEXPLICABLE CONTINÚA SIENDO PINTOR DESCONOCIDO FUERA DE SUS GRANDES COMPOSICIONES HISTORICISTAS.
DUDO QUE UNA REFLEXIÓN A LA CONTRA DE LA MODERNIDAD PASE A IMPERAR EN EL MUNDO DEL ARTE, COMO PARECES QUERER BARRUNTAR, SINO QUE PROSEGUIREMOS DESPEÑANDONOS POR EL ACANTILADO DE LA VACUA RETÓRICA DESOBJETUALIZADORA DEL CURATORISMO REINANTE, QUE HA CONSEGUIDO MATAR AL ARTISTA Y SUPLANTARLO CON SU DISCURSO ESTÉRIL.
EN CUANTO A ESTE ATERRADOR PANORAMA DEL VACÍO, QUERIDO PEPE, NO ME RESISTO A PEGAR ALGUNAS DE LAS ATROPELLADAS PERO LÚCIDAS REFLEXIONES DE E. ARROYO EN EL ÚLTIMO BABELIA, CON OCASIÓN DEL NUEVO ARCO:
"Según don Alberto Ruiz de Samaniego, el comisario del Pabellón de España de la actual Bienal de Venecia, "es evidente en la actualidad que el mercado corrompe pero también hay que pensar en que produce sus propios efectos, como la desmaterialización de los objetos en media, a-media, multimedia, red". Me pregunto qué comunidad autónoma le habrá nombrado. No, mi querido amigo, el mercado del arte no corrompe. Lo que de verdad corrompe es esta retahíla de tonterías, de corrupción, de cinismo, de ignorancia, de injusticia, de subvenciones en la que estamos metidos."
"Es desagradable truncar una cita y tengo que completar el párrafo donde don Alberto Ruiz de Samaniego evoca el mercado que corrompe y "los objetos en media, a-media, multimedia, red"; prosigue desde su seguridad filosófica afirmando que "la modificación del espacio objetual e intercambiable, sumado a la dificultad de controlar la velocidad y los derechos de reproducción, la democratización del acceso a la producción con el abaratamiento de la edición digital formularán muy pronto el cambio de relación entre creador, productor, actor, público y mercado. El arte del siglo XXI va a ser un arte sin objeto, desmaterializado. Debemos generar espacios simbólicos y productivos que favorezcan este tipo de flujos".
En 1959, cuando yo debuté en París como pintor detrás de un cuadro mío vivían tres personas: mi galerista, vendedor de la pintura, el negociante en materiales artísticos y yo. He olvidado el nombre de este simpático comerciante de la Rue du Dragon pero recuerdo que fiaba y cobraba poco a poco, pero de repente cuando yo percibía algo también se aprovechaba él. Hoy si se hicieran cálculos de la gente que vive detrás y gracias a la venta de un cuadro, se podría evaluar que serían más de cien, con la Agencia Tributaria a la cabeza. Me gustaría saber la identidad y la categoría de estos beneficiarios: conservadores, curators, organizadores de exposiciones, asesores, comisionistas, conseguidores, organizaciones varias, agentes de prensa, ayuntamientos, corporaciones, cajas, fotógrafos, restauradores, decididores... ¿para qué seguir?
Se está preparando la futura universidad internacional de curators. Parece ser que el curso académico no deberá exceder de siete u ocho meses (lenguas extranjeras serán bienvenidas). Los franceses, que en el tema de la cultura siempre están inventando algo, ya han creado en Grenoble L'École du Magasin. En esta escuela de carácter universitario se impartirán las siguientes asignaturas: critical curatorial cybermedia, curating and commissioning contemporary art, sin olvidar el curatorial training program. La directora Alice Vergara Bastiend afirma que "el curatorial es un campo de estudio que se distingue del de la obra de arte como objeto autónomo. Se entiende como una práctica interdisciplinaria y crítica". La directora del FRAC Lorraine, Béatrice Rose, no se queda a la zaga cuando nos recuerda que su papel es en principio poner ideas sobre la mesa y defenderlas con las producciones de los artistas."
"En el último Arco, distraído me confundí de puerta y ya casi entrando en el pabellón 7 me topé con un vídeo donde aparecía la extremidad de un hombre blandiendo una manguera de gran potencia, por lo que se adivinaba de la intensidad del chorro, que a tres metros de distancia regaba a una pobre desgraciada en pelotas."
"El miedo agarrota. Una galerista conocida me confesaba, y yo creía que se trataba de una broma pero iba en serio, que temía su exclusión porque había expuesto un botero. Hubiera sido lo mismo si hubiera colgado un arroyo. Además de ser insoportable es humillante."
"¿Una posible solución? Dividir los dos pabellones, con dos jurados diferentes. Los carrozas con los carrozas y los emergentes con los de la manguera. Una galería brasileña que está en el jurado y que lo que de verdad le gusta es la manguera, dudo si podrá juzgar a una galería que expone a Wifredo Lam, a Bram Vam Velde o a Sam Francis por la sencilla razón de que a lo mejor no sabe quiénes son exactamente."
(io) Posdata:El simpático comerciante de la rue Dragón del que Arroyo no recuerda el nombre era un asturiano, fallecido hace unos años, que se llamaba Antonio Marín. Para los franceses Antoin Marin.
1 comentario
Anónimo -
Completamente de acuerdo en que la idea de progreso no es aplicable al arte.
Lo de la pintura histórica no me acaba de llegar porque no suelo sintonizar bien con la pintura narrativa, sin embargo me impresiona enormemente la calidad, la maestría, de los pintores
Con respecto al discurso (o los discursos) de Ruiz de SAmaniego, a quien he tenido la oportunidad de escuchar y leer en alguna ocasión, me da la impresión de que resulta tan escurridizo que lo mismo sirve para un roto que para un descosido. ¿SErá que mi pobre intelecto no alcanza o será que como no soy cristiano viejo no puedo admirar el retablo de las maravillas? Eso sí, es una persona muy pero que muy leída, lo cual le permite apuntalar-legitimar su discurso con un arsenal de citas eruditas